Briñas Ircio

BRIÑAS

Apellido procedente de la villa de Briñas. De aquí paso a las provincias de Burgos, Zaragoza y Alava. En Alava poblaron en Salinillas y de aquí son los siguientes personajes que probaron hidalguía:

I Juan Briñas(1572) que se caso con María Leyba(1573), de la misma naturaleza y tuvieron a:

II Francisco de Briñas(1601) que se caso con Lucia de Bozo(1612) y fueron padres de:

III Antonio Briñas y Bozo(1647), natural de Salinillas y Caballero de Santiago en cuya orden ingresó el 22 de noviembre de 1687. Fue soldado y murió sin descendencia.

A finales del S. XVI Mencia de Briñas, natural de Salinillas de Buradón, mandó hacer el pie de la vieja custodia por lo que se pagó cinco mil maravedís.

Hubo personas con este apellido en el mismo pueblo de Briñas, Haro, Ircio, etc.. Otra casa hubo en Bureta (Zaragoza).

Etimología: Pastizal, lugar del molino pequeño.

Escudo: Los de Bureta, escudo partido, 1º de plata, con un árbol de sinople y dos lobos de sable atados a su tronco con cadena del mismo color. 2º de oro, con brazo armado de sable y moviente del flanco siniestro, empuñando una espada desnuda del mismo color. Bordura general de gules con ocho sotueres de oro.

El apellido Perez de Briñas aparece en las Juntas Generales de 1515, en las cuales Juan Perez de Briñas representa a Salinillas como alcalde que era.

Relación de hijosdalgos año 1793:

  * Aniceto y Matías de Briñas.

  * Manuela de Briñas y su hija Thomasa de Albiz.

 

 

IRCIO

Según algunos autores este apellido proviene de las Encartaciones del Señorio de Bizkaia y aparece citado en documentos del año 1550. Aunque por la proximidad de Salinillas al pueblo de Ircio, cabe más señalar que provenga de éste.

El primer Ircio  que aparece en los documentos es Urban de Ircio que en su matrimonio con Maria Laguillez tienen a Pedro Ircio Laguillez nacido en Salinillas en el año 1580.

En el año 1603 Urban de Ircio es miembro del concejo de justicia y regimiento. En el año 1793 Silvestre de Ircio es alcalde y juez por el estado ordinario. El 29 de junio de 1792 Francisco de Ircio fue nombrado por los patronos de la ermita de San Jose encargado de la guarda y cuidado de dicha ermita. 

Etimología: Pastizal, helechal.

Escudo: En oro, una bordura de gules, engolada en cabeza de dragones de sinople y acompañada en lo alto de una cruz floreteada de gules y en lo bajo, de un león rampante de sable.